¿Cómo inmunizarnos a la estrategia del shock?

Hace poco, comentábamos las técnicas de manipulación que usan los gobiernos y mass media para privatizar la educación pública y todos los bienes comunes.

En estos primeros meses de legislatura, la mayor parte de esta manipulación está encaminada a postrarnos en un estado de shock, para que, temerosos y paralizados, no reaccionemos ante las brutales pérdidas de derechos que se nos imponen. Las medidas, anuncios y declaraciones de los gobiernos autonómicos y el central nos son administrados, día tras día, gradualmente, como un veneno que nos somete a una ansiedad constante. Y sin posibilidad de tregua, ya que los medios de comunicación –a los que ya casi habría que llamar de propaganda− vocean incansablemente, como un eco descorazonador, esas malas noticias que nos vienen desde arriba (desde los consejos de ministros o las agencias de calificación).

Naomi Klein ha explicado en su libro La doctrina del shock cómo el neoliberalismo, incapaz de convencer a los pueblos mediante argumentos (pues las medidas neoliberales están esencialmente en contra de los pueblos), sólo ha logrado imponerse gracias a golpes de estado, declaraciones de guerra o situaciones donde catástrofes naturales u otros fenómenos traumáticos tenían a las poblaciones atenazadas por la ansiedad y el miedo.

¿Y qué sino el miedo es lo que nos están tratando de inocular en este país? Miedo a perder el empleo, a no poder encontrarlo nunca o a que el que nos ofrezcan sea lisa y llanamente explotación; miedo a perder el derecho a la asistencia sanitaria y a no poder proporcionar una educación adecuada a los hijos; miedo a acabar durmiendo en la calle víctima de un desahucio; miedo, en fin, a ser detenido injustamente por protestar de forma pacífica en una manifestación.

En este artículo veremos cómo la estrategia del shock surte efecto en nosotros mediante la llamada indefensión aprendida. Pero también cómo podemos escapar de este estado de postración si aprendemos a atribuir correctamente las causas de nuestro malestar.

La “indefensión aprendida”, arma de destrucción masiva

Que los de arriba nos tratan como a perros es cierto, o al menos como a los perros del experimento de Seligman.

A finales de los 60, el psicólogo Martin Seligman realizó el siguiente experimento. Dentro de una caja de laboratorio, un perro era expuesto a shocks eléctricos que no podía evitar. En cambio, en otra caja, otro perro sí que podía interrumpir esos shocks pulsando una palanca. Más tarde, los perros eran situados sobre una superficie electrificada de la que podían escapar simplemente saltando una barrera. El perro que había podido controlar los shocks la saltaba, mientras que el otro perro, en lugar de buscar la salida exitosa a la situación adversa, permanecía aguantando las descargas de manera pasiva. Había, pues, “aprendido” su indefensión. ¿Para qué gastar energías sabiendo (en realidad, creyendo) que de esos estímulos adversos no se puede escapar?

La indefensión aprendida es la antesala de la depresión. No hacer nada porque se piensa que ya todo es inútil.

En este vídeo podemos ver cómo una profesora provoca indefensión aprendida en un grupo de alumnos con una sencilla actividad:

De lo cual podemos inferir que, mediante el poder actual de los medios de propaganda, es factible inducir este estado depresivo en buena parte de la población, para mantenerla en la pasividad. Por ejemplo, gracias a este vídeo podemos comprender por qué las víctimas de la Alemania nazi acabaron aceptando su suerte sin presentar apenas resistencia, al igual que muchas mujeres maltratadas terminan resignándose a su situación:

Terrible, ¿verdad? Pero más terrible aún es el darnos cuenta de que esta inoculación de indefensión aprendida es lo que están haciendo ahora mismo con nosotros. Nos tratan de convencer de que aceptemos resignadamente pérdidas de derechos y privatizaciones de bienes públicos sin resistir ni protestar. La consigna: que hagamos lo que hagamos no va a servir para nada.

Como al perro víctima del experimento de Seligman, se nos somete a unos shocks (nombrados por los eufemismos “ajustes” o “recortes”) que, al parecer, no podremos evitar por mucho que hagamos huelgas, acciones de concienciacion o nos manifestemos. Y además, se ha comenzado a castigar a muchos de los que protestan mediante detenciones poco justificadas y prisiones preventivas de dudosa compatibilidad con derechos humanos fundamentales.

En Grecia, donde llevan más tiempo sufriendo este salvaje saqueo de lo común, la depresión se extiende como una epidemia entre las clases populares, y el número de suicidios se dispara. En su artículo ¿Y si no hiciésemos nada? el filósofo Amador Fernández-Savater se hace eco de esta desesperación que cunde entre los griegos:

Más de diez huelgas generales en Grecia, pero ¿se ha conseguido algo? Alexandra-Odette Kypriotaki ha participado en las movilizaciones desde 2008, pero se marchó a Londres con esa pregunta en la cabeza. “En mi país ya no se encuentra trabajo ni de camarera”, me contó. La conocí en un encuentro organizado por el pensador-activista Franco Berardi (Bifo) en Barcelona. Su intervención en aquel encuentro me pareció muy sugestiva y desafiante.

A partir de un balance autocrítico de las lógicas de enfrentamiento y movilización, que no han frenado ni un ápice la devastación social, pero han expuesto demasiados cuerpos a la represión y la destrucción, Alexandra propone recomenzar por otro lado: ni luchar ni confrontar, sino desertar; ni reivindicar ni pedir, desplegar aquí y ahora el mundo en el que queremos vivir; ni actuar ni movilizarnos, sino entregarnos a cierto abandono. Hacer fuerza de nuestra debilidad.

El capitalismo nos exige una disposición permanente al deseo, al contacto, a la producción. Un tiempo permanentemente ocupado, bajo presión, en pos de resultados. Hoy es obligatorio estar contentos, ser optimistas y positivos. Debemos proyectar constantemente la imagen de que sabemos, de que va todo bien, de que tenemos las cosas bajo control, de que somos fuertes. Pero, ¿no nos exige demasiadas veces lo mismo el activismo político? Lucha, resultados, la respuesta en la boca, la moral siempre alta, fuera los tímidos, los dubitativos y los melancólicos…

¿No podríamos formar un ejército de débiles, de torpes, de ignorantes? La consigna sería: “sí, estamos deprimidos, qué pasa”? El programa: “no sé”. La huelga, no hacer nada de nada, ni siquiera movilizarnos. Do nothing day… un miércoles, luego el jueves y así.

La figura del castigador indefenso

Descargas eléctricas arbitrarias, suministradas a intervalos irregulares e inaccesibles a nuestro control. Shocks/saqueos que llaman “recortes” o “controles del déficit”. Maltrato psicológico hasta límites que hace pocos meses nos hubieran parecido increíbles, de ciencia-ficción: «El FMI pide bajar pensiones por «el riesgo de que la gente viva más de lo esperado».»

Las agencias de calificación, los organismos internacionales (FMI, BM, OCDE, OMC) que están al servicio de las élites financieras, la Comisión Europea y el BCE nos someten a unas exigencias y ajustes, graduales e inexorables, ante los que nos aseguran que nada podremos hacer. Casos como el de Islandia, sin embargo, son silenciados en los medios de masas.

¿Cuál es el papel de nuestros gobernantes ante esta situación? Sencillamente, el de ejecutores eficientes del saqueo que se ordena “desde arriba”: “hay que hacer lo que hay que hacer”, “nos lo está pidiendo la Unión Europea”, “hay que dar confianza a los mercados”, etc.

No es necesario atribuir maldad ni sadismo a los políticos que realizan estos encargos, aunque a veces estemos tentados a ello debido a algunas de sus declaraciones. En su libro Eichmann en Jerusalén, Hannah Arendt expuso su concepto de banalidad del mal: un funcionario nazi mediocre como Adolf Eichmann fue capaz de poner en práctica asesinatos en masa, no por crueldad, sino simplemente porque actuaba dentro de las reglas del sistema al que pertenecía sin reflexionar sobre sus actos. Lo que hizo Eichmann fue cumplir eficientemente con las órdenes que provenían de estamentos superiores, que es lo que hacen nuestros políticos en el gobierno respecto a los mandatos de quienes representan los intereses del capital financiero. Y sin poderse cuestionar las reglas a las que obedecen, ya que están cegados por los postulados de una ideología dominante, el neoliberalismo, que además legitima el hecho de que estos mismos gobernantes –o sus familiares o sus amigos– se enriquezcan, de una manera que nosotros consideraríamos inmoral, gracias a la pérdida de derechos sociales de los ciudadanos y a la privatización del sector público.

En una vuelta más de tuerca, los gobernantes pueden llegar a presentarse ante la opinión pública como víctimas ellos mismos de indefensión aprendida. Es el “aunque me gustaría hacer otra cosa, yo no puedo hacer nada, porque me lo ordenan desde arriba, y las consecuencias, si actúo de otra manera, podrían ser peores”. El mismo mandatario se convierte en modelo público de indefensión aprendida, y ya sabemos que nada enseña tanto como el ejemplo. Fue el caso de José Luis Rodríguez Zapatero cuando la llamada de Barack Obama. Ya vemos que se trata de un recurso nada nuevo. Pero ahora, con nuestro actual presidente, Mariano Rajoy, este fenómeno se ha exacerbado tanto, que él mismo se ha convertido en ejemplo viviente de indefensión y debilidad, con sus “chuletas” en los discursos, sus ausencias, sus gestos y acciones. Aquí lo vemos, en el Senado, huyendo de los periodistas que le querían preguntar sobre el último recorte presupuestario para Educación y Sanidad:

En definitiva, lo que estos gobernantes nos transmiten, al escenificar su indefensión, es que nuestro país ya no es soberano, sino que está bajo las órdenes de los que en realidad mandan: los famosos “mercados”. Pero ¿por qué no son sinceros y coherentes, dimiten y dejan que España se convierta en un “protectorado” del capital financiero, como lo son ya Italia o Grecia? Tal vez su papel en la estrategia del shock aún no se haya cumplido del todo. Todavía no estamos completamente sujetos a la indefensión aprendida. Pero ¿podremos hacer algo para no ser vencidos del todo por ella?

Bien vive quien bien atribuye

Para inmunizarse ante la indefensión aprendida, Seligman aplica la teoría de la atribución de Fritz Heider. En El optimismo es una ventaja y un placer que se adquiere estudia tres dimensiones o características del estilo atribucional o atribución causal:

Personalización: Consiste en atribuir causas internas o externas a los buenos o malos sucesos.  Si me siento culpable cuando algo me sale mal “porque yo soy así”, o soy capaz de externalizar el problema y hacerme responsable de producir cambios.  Esta dimensión tiene que ver con la autoestima. Atribuir los malos sucesos a causas externas nos hace más inmunes a la indefensión aprendida.

Permanencia: Qué duración, estabilidad o inestabilidad en el tiempo atribuimos las causas de los buenos o malos sucesos.  Sus extremos se expresan en el discurso en los polos  Siempre-Nunca. Pensar que las causas de los malos sucesos son estables, permanentes, incluso definitivas, nos hace más vulnerables a la indefensión aprendida.

Penetración: Cuántas áreas de nuestra vida se ven afectadas por nuestra buena o mala suerte, si estas causas nos afectan de manera global o específica.  Se expresa en el discurso en los extremos Todo-Nada.

Por otro lado, en su trabajo Indefensión aprendida en sujetos humanos y su inmunización, José Ramón Yela Bernabé y José Luis Marcos Malmierca hacen referencia también a la importancia de la controlabilidad que tenemos de los sucesos.

Despersonalización: el problema está en la situación, no en nosotros

Una manera que tiene el poder de provocarnos la indefensión aprendida es culpabilizarnos de lo que está sucediendo. Se nos dice que “hemos vivido por encima de nuestras posibilidades”, cuando la realidad era que las posibilidades, para los de abajo, más bien eran inferiores a los estándares de una vida digna, en tanto a bajos salarios o carestía de bienes básicos como la vivienda.

Un ejemplo de explicación sistémica de lo que nos está pasando es la del geógrafo David Harvey. Según él, vivimos un proceso de acumulación por desposesión. Una vez disminuidos los salarios a partir de los años 70, las tasas de ganancia las está obteniendo el capital a partir de la privatización de los bienes comunes, la financiarización de la economía, la gestión y manipulación de las crisis y la redistribución desigual de los recursos. En este vídeo podemos ver cómo este autor explica la crisis actual:

Autores como Vicenç Navarro han señalado que ha sido precisamente la falta de recursos entre las clases populares la que ha sido causante del endeudamiento, y no al revés. Si, por ejemplo, hubiera habido políticas públicas de acceso universal a una vivienda digna, la gente no tendría que haberse endeudado tanto, y no se habría producido la burbuja inmobiliaria y crediticia que originó la crisis.

Por tanto, no debemos caer en la trampa de pensar que la culpa de esta “crisis” (acumulación por desposesión) la tenemos nosotros. Debemos ser capaces de analizar, más allá de la sobreabundancia informativa de los mass media, en qué consiste el modelo social, económico y cultural vigente, y en qué podemos contribuir para atenuar sus efectos dañinos, o incluso para plantear modelos alternativos diferentes.

La crisis es crisis también del modelo económico imperante

En cuanto a la estabilidad de la causa de nuestro problema, debemos preguntarnos: ¿esta acumulación por desposesión va a durar siempre? ¿Es el estado definitivo de la historia?  Lejos de ello, son muchos los que apuntan a que estamos viviendo una crisis global del capitalismo, debido a los límites ecológicos que impiden el desarrollo del modelo de acumulación infinita. Ramón Fenández Durán, por ejemplo, ha indicado que el previsible agotamiento de energías fósiles va a suponer un colapso de nuestra civilización.

El documental Historia de las cosas describe de modo muy didáctico cuáles son esos límites humanos y ecológicos del modo de producción imperante:

Así que en vez de preocuparnos por lo que nos está pasando, ¿no deberíamos ya empezar a pensar en alternativas?

Oportunidades para la emancipación

En cuanto a la penetración del problema, ¿está toda nuestra persona afectada de manera negativa por el saqueo de lo común?

Es cierto que esta crisis/estafa afecta a buena parte de nuestras vidas, por el desempleo, el empeoramiento de los servicios públicos y la pérdida de derechos ciudadanos. Pero también es verdad que hay vida –y mucha vida– más allá de la crisis.

Ahora es cuando tenemos la oportunidad de explorar nuevas formas de relacionarnos con nosotros mismos, con los demás y con nuestro entorno. Cuando podemos buscar modos de vida diferentes.

Porque este modelo económico, incluso cuando estaba en las fases de auge, producía insatisfacción. Bajo la superficie del consumismo, convertido en estafa piramidal gracias a la abundancia del crédito fácil, yacía latente una versión moderna del Rey Midas. Todo lo que el modelo tocaba lo convertía en mercancía, hasta nuestras vidas y los rincones más íntimos de nuestro cerebro.

La alienación no ha sido nunca tan grande como hasta ahora. Mientras que en la época del fordismo, la de la producción en masa, el trabajador estaba alienado durante su tiempo de trabajo, ahora, en nuestros días, es del conjunto de nuestra vida de donde extrae el capital sus tasas de ganancias.

Hoy, […] bajo el predominio de la producción inmaterial, la teoría del valor y el análisis de la explotación no pueden ser anclados en un sistema de unidades temporales mensurables. Así en la medida en que la producción de valor es entendida como producción de lo común, la explotación es expropiación de lo común. Lo común, en pocas palabras, se ha vuelto el lugar del plusvalor. La explotación es la expropiación privada, parcial o total, del valor producido en común. Las relaciones sociales y las comunicaciones son, por su naturaleza, comunes y sin embargo el capital busca apoderarse privadamente de parte de su riqueza. Pensamos, por ejemplo, en el beneficio extraído del trabajo afectivo; y lo mismo vale para la producción lingüística de las ideas y los saberes: todo aquello que se hace en común es privatizado. También el saber producido por las comunidades indígenas o el conocimiento generado por la cooperación científica son transformados en propiedad privada. (Hardt M. y Negri, A., El trabajo de Dionisos, Akal, Cuestiones de Antagonismo, Madrid, 2003)

Lo más común, lo que todos compartimos, es lo que están “expropiándonos” algunos, el 1% de la población, para seguir acumulando capital. La publicidad se apropia de nuestra cultura común para invadir nuestros cerebros con pautas de consumo. Nos relacionamos con los demás desde criterios de rentabilidad, y nosotros mismos nos convertimos en mercancías al ponernos en venta en el mercado laboral o al tratar de obtener beneficios en nuestras vidas personales.

La parte en que nos afecta la crisis es, por tanto, minúscula si la comparamos con todo lo que esta crisis del sistema puede ofrecernos:

  • Volver a recuperar la autenticidad personal. Dejar de tratarse a sí mismo como una parte más de la sociedad del espectáculo, es decir, como una imagen atractiva para el sistema, imagen que se convierte ella misma en publicidad viviente. Como explica Tiqqun en Primeros materiales para una teoría de la jovencita (Acuarela Libros, Madrid 2012), el capitalismo obtiene actualmente tasas de ganancia por medio de nuestra capacidad de seducción.
  • Lo que más acrecienta la felicidad son las relaciones interpersonales. Fomentar las relaciones de cooperación en lugar de las relaciones de competencia. Lo que se da no se pierde.
  • Que la creación cognitiva (el pensamiento, el arte, el conocimiento) no sea expropiada del intelecto común mediante la llamada propiedad intelectual; una ilegítima apropiación que responde a los intereses de las grandes corporaciones dedicadas a la producción y distribución de productos culturales y tecnológicos.
  • Promover una economía del bien común, donde se valore, no la rentabilidad, sino un modelo de empresas cooperativas que hagan el mayor bien posible a la sociedad y al entorno.
  • Acabar con el predominio de la economía financiera sobre la economía productiva. Terminar con la estafa de la emisión privada de dinero-crédito que esclaviza a personas y pueblos mediante el endeudamiento.
  • Plantearse iniciativas como la de la renta básica universal, para que uno trabaje libremente, y no se vea forzado a trabajar para subsistir. Los recursos naturales son de todos.
  • Y, complementando a la renta básica, ¿por qué no proponer, como lo hizo en su día el presidente estadounidense F. D. Roosevelt, un salario máximo, gravando con un 100% a partir de un tope de renta? “Que ningún ciudadano –escribía J. J. Rousseau– sea tan rico como para poder comprar a otro, ni ninguno sea tan pobre como para ser obligado a venderse”.
  • Valorar propuestas ecológicas como la del decrecimiento: consumir menos, fabricar menos, diseñar objetos totalmente reciclables y gastar poca energía. Desarrollar economías locales.
  • Construir canales de distribución autónomos al margen de las grandes distribuidoras que controlan casi toda la actividad comercial, desde el productor a la venta al público.
  • Reconstruir la esfera de lo público de una manera verdaderamente democrática, con la participación de todos y en igualdad.

El futuro está en parte en nuestras manos

Por último, ¿cuál es nuestra capacidad de control respecto a la situación que nos afecta?

En el citado artículo, Yela Bernabé y José Luis Marcos Malmierca defienden que, para inmunizarse a la indefensión aprendida, lo mejor es ni haber tenido éxitos siempre ni siempre fracasos. Ser conscientes de que hay cosas que podemos controlar y cosas que no. “Así pues –decía Epicuro–, conviene recordar que el futuro ni está enteramente en nuestras manos, ni completamente fuera de nuestro alcance, de suerte que no debemos ni esperarlo como si tuviese que llegar con seguridad, ni desesperar como si no tuviese que llegar con certeza.”

Hay muchos ejemplos de resistencia a la acumulación por desposesión que han triunfado en el mundo, como la guerra del agua en Bolivia o la insurrección de Chiapas. Lo que pasa es que la historia, que casi siempre está escrita por los de arriba, se complace en recordarnos solo las derrotas en los esfuerzos por la emancipación.

Aquí, en España, y a pesar de todos los tropiezos de un niño que aprende a dar sus primeros pasos, el Movimiento 15M, ha obtenido importantes logros y proyección internacional. Ha concienciado a buena parte de la ciudadanía de la raíz de nuestros problemas, ha enlazado movimientos sociales muy dispares y está siendo un excelente humus para el nacimiento de redes cooperativas y solidarias.

Cometeremos errores, sin duda, pero errores que nos harán más sabios.

Actuar para abrir posibilidades

En definitiva, ante el miedo que nos atenaza, debemos tener presente que de lo que nos pasa no somos culpables, que la crisis es crisis del modelo económico vigente –que no es estable sino todo lo contrario–, y que este cambio puede ser una oportunidad para un nuevo mundo más humano, donde no impere la dictadura del dinero y del resto de mercancías.

Y, sobre todo, tener presente la enseñanza de Alain Badiou: hay que actuar. Porque no es nuestra acción la que debe plegarse al campo de lo posible, sino que es la propia acción la que puede abrir un nuevo espacio de posibilidades. “Un sujeto –dice este filósofo– es un punto de una conversión de lo imposible en lo posible. La operación fundamental de un sujeto es estar en el punto en donde algo imposible se convierte en posibilidad”.

Prohibido rendirse

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56 comentarios en “¿Cómo inmunizarnos a la estrategia del shock?

  1. afiso

    GRACIAS! Este trabajo da para una unidad didáctica casi para cualquier asignatura: Economía, Matemáticas, Geografía, Historia, Comunicación Audiovisual, Educación Plástica y Visual, Inglés, Ciencias Naturales, Lengua, Conocimiento del Medio… y ayudaría a cambiarnos/cambiar el mundo.

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  2. Stacco

    Fantastico texto. Personalmente me ha ayudado mucho has sabido articular varias cosas que creo que subyacen la percepción de muchos. Gracias, y me dispongo a compartirlo.

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  3. Mireya

    Maravillosa reflexión y bien documentada, sobre el necesario rearme moral y ético, del que los profes, sí sí, también los profes, siempre los profes, debemos ser protagonistas. Saludos desde Valencia, tierra de la negación y la inmoralidad

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  4. mariangeles

    en el ánimo de positivizar, mantener como catecismo agnótico a Kleim y Chomski, como certeros » avisador y avisadora» de las piedras en las que vamos tropezando , al igual que nuestros antepasados, desde aquí me siento afardecida, aunque me haya rendido, de todo lo que nos estña ocurriendo en el aula y lo que ja ocurrido porque gracias a ello SOYS Y ESTAIS, y desde mi consejo de progesora de literatra ( exprofesora) este artículo tienen una coherencia /cohesión logradísima por la imbricación con los temas a los que hacéis referencia ( ahora enlaces según decis) para así hacer una costelera de recuerdos que logre emborrachar nuestro estado existencial.
    Hay veces que os superáis , aunque creo que este tipo de trabajos tan extenuentas proceden simepre de la misma fuente.
    Gracias

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  6. César

    Magnífico artículo!! PROHIBIDO RENDIRSE, juntos podemos cambiar el mundo. Muchas gracias por reunir tanta información, ahora lo importante es difundirla, ánimo!

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  7. Carmen

    Muchas gracias, me ha gustado mucho el artículo, en especial los primeros párrafos en los que se presenta la teoría de la Indefensión Aprendida de Seligman para ilustrar la manipulación que se está haciendo sobre todos nosotros. Personalmente me siento muy feliz de que haya empezado a minimizarse la escalada del consumismo en la que estábamos metidas de las últimas décadas. Esta es la parte que me hace más feliz de esta crisis, me he sentido maravillosamente viendo de nuevo a las familias y grupos de amigos con sus tortillas en la playa. La gente aprovecha su ropa más allá de tirar a la basura lo que solo se había puesto un par de veces. Me encanta la idea de las relaciones de colaboración, de intercambiar la mermelada por una clase de mates, y creer que nos vamos a hacer más solidarios. La amenaza de que todos podemos tener la misma «suerte», nos hace siempre más solidarios. Es triste, pero necesitamos la amenaza para darnos cuenta de que necesitamos a los demás, a los vecinos, a la comunidad. Vamos a agarrarnos a esta fuerza para crear nuevos cauces del desarrollo que queremos, del mundo que queremos, no del que nos han impuesto. Nuestros valores pueden ser otros y aprovechar este momento para luchar por ellos. Gracias. Carmen

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  8. yel

    lastima que la gente que esta realmente apurada , vamos, sin comer no creo que tenga internet para leer este articulo y «no rendirse». desde el sofa de casa todo suena bonito … pero lamentablemente donde vivo no veo ningun indicio de humanidad o de menos consumo, es mas, veo mas el salvese quien pueda (es lo que veo)… veo mucha amargura…

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  9. Ángel Custodio

    Sí…cada vez que alguien se levanta moviliza energías que son como una fuente inagotable de creatividad, hermandad y esperanza…Gracias!

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  10. Jeanneth Martinez

    Saludos desde Ecuador, muy interesante el artículo, mi país también tuvo un tiempo de indefensión y fue muy triste y devastador, creo que ahora estamos en mejor camino, personal y socialmente. Un abrazo

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  11. paco

    Esto está escrito por psicólogos, no hay duda. Recoge las teorías de la autoridad y la obediencia de Milgram y la TREC de Ellis para superar la depresión.
    Menciona por encima algo para mí indispensable: la solidaridad y la cohesión del grupo.
    Muy buen artículo.

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  12. Modesta Regueira Nuñez

    Gracias! Desde Vigo. Estupenda reflexión, explicada con una claridad diáfana, enormemente accesible. Llevo décadas con estos pensamientos en mi. Luche por ellos desde el lugar incorrecto. No decaigo, sé que estoy en el camino adecuado. Gracias! Gracias! y enhorabuena por este trabajo.

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  17. humushumanworld

    Cuando dices: «Lo que más acrecienta la felicidad son las relaciones interpersonales», estoy de acuerdo, pero para ser ecológicamente inclusivas, habría que sumar las relaciones «interespecíficas» y con el paisaje o ecosistema, para mí «el talón de aquiles» del eurocentrismo, tan solipsista que no ve más allá del individuo (humano), ni de nuestra especie (humano = zomby). Salir del Shock («por la puerta trasera») es aprender del Sur y de su comunitarismo inclusivo, luego ecosistémico. Salir de nuestra (eurocéntrica, antropocéntrica) desmemoria, de nuestro Alzheimer, volviendo a mirar y conversar, con los mirlos, las gotas de agua al sol… eso que llamaban «las pequeñas cosas», como indica este «acuciante» enlace:
    http://www.psychologytoday.com/blog/the-power-rest/201105/is-another-way-avoid-alzheimers-0

    Quizas así comprendamos por qué nos costaba tanto mirar, como dices, hacia las alternativas, hacia la ciudad y el territorio, hacia los huertos urbanos…, hacia lo que nos construye.

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  19. carmena

    Me ha encantado este post o artículo o lo que sea, me ha dado ánimos para seguir luchando para conseguir otro mundo, muchas gracias

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  20. susana

    Es super importante, como has comentado, dar a la gente la posibilidad de creer en algo, siempre se puede hacer algo, no entrar en el desánimo. Si estuviéramos todos unidos, podríamos. Somos más, y somos los que trabajamos. Nos necesitan. Intentar poder verlo.
    Estupendo artículo.

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  21. Marcelo Daniel Nasberg

    es una realidad que se va a imponer por la limitante ecológica ,el planeta está manifestandose y sus habitantes sufriendo las consecuencias…es hora de cambiar el paradigma.,nuestra forma de vida y de consumo antes de que sea tarde

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  22. Sofi B.

    Me ha encantado y pienso que artículos así son muy necesarios.

    Me entristece porque precisamente el año pasado mi hijo y sus compañeros en su instituto, uno de la educación pública que tanto defiendo, han vivido una clara situación de «indefensión aprendida» con un profesor que lleva años haciendo lo mismo y es conocido en toda la ciudad.

    Y nadie hace nada, empezando por sus compañeros profesores. Hay que hacer una gran labor para que la educación deje de ser un granero de la indefensión aprendida, que tan claro nos habéis mostrado.

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  24. Victor Oliveira Mateus

    Excelente artigo. Esta teoria e os seus autores (sobretudo a Noami Klein) têm sido muito atacados por teóricos neoliberais, pessoalmente acho a teoria do choque um paradigma que explica perfeitamente muito do que nos está acontecer. Obrigado por me dar a ler este fabuloso ensaio!

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  26. pablo

    Ciertamente , este artículo aporta una luz en la oscuridad , ? como hacer que gente que no tiene acceso a internet se pudieran beneficiar de éste trabajo y contribuir así a fomentar los valores que se fomentan en él ?
    hay que hacer que los desposeidos recuperen la autoestima y su capacidad de decisión

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  28. otras visiones

    Frente a los indiferentes, pasivos, buenas personas, cobardes… ¿odio, compasión… o ambos?

    Gran Vía. Madrid. 2012.
    14-N Huelga general. 12:30 de la mañana. Observo anonadadx como un agente de las U.I.P., con el casco puesto y la visera levantada, acorazado bajo su exoesqueleto –como un enorme insecto- agarra por el cuello a una joven manifestante. Con la mano libre agita la porra y grita a pleno pulmón, tiene los ojos desorbitados, se mastica la mandíbula, está desencajado… Se me viene a la cabeza una consigna escuchada hace unas semanas en un piquete antidesahucios en la zona de Lavapiés: “Ni tiros al aire, ni por la nariz / fuera policía de los barrios de madriz” (alguien debería controlar la sustracción de los alijos de las dependencias policiales: la mezcla de obediencia ciega, conciencia de impunidad, fuerte preparación física, material represivo y cocaína es explosiva: avisamos con tiempo). Los compañeros de la chica intentan impedir que se la lleven y forcejean con el grupo de antidisturbios… Una sombra pasa a mi lado y escucho: “¡Que vergüenza, pegando a la policía!” Me vuelvo de un tirón y clavo mi mirada en un individuo de edad avanzada pero no anciano. Intento escrutar su rostro: su indignación parece sincera, no encuentro atisbos de ironía ni de cinismo en su gesto… Vuelvo de nuevo la vista hacia el altercado y alcanzo a ver como las fuerzas de “seguridad” se emplean sin miramientos, con contundencia… Y me pregunto: ¿Cómo es posible que ese hombre y yo estemos viendo cosas tan diferentes?

    La Tierra. Mediados del S. XII.
    Las señales luminosas se vieron perfectamente en todo el planeta, sin necesidad de instrumento óptico alguno, durante varias jornadas, de noche y también de día. Se trataba de una nova, es decir, de la llegada de la luz procedente del nacimiento de una estrella, con las enormes y violentas explosiones que acompañan ese tipo de fenómenos. Los astrónomos persas lo observaron y dejaron constancia de él en sus anales, cosa que también hicieron, según han comprobado los historiadores, los astrónomos indios, chinos y aztecas. Los astrónomos de Florencia o de París, sin embargo, no registraron el fenómeno. No vieron las señales, o si las vieron, no les concedieron importancia. La razón es que los astrónomos europeos, eran aristotélicos, y estaban convencidos por ello de la inmutabilidad de las estrellas. En lo que a ellas se refería, ningún movimiento o cambio de estado era posible. Por eso, cegados por ese prejuicio, no repararon en ello. Lo que viene a demostrar que en buena parte de las ocasiones, no sabemos lo que vemos, sino que vemos sólo lo que sabemos, lo que encaja con coherencia en nuestro sistema de ideas previo.

    Harlem (Nueva York). 1940.
    La pareja de psicólogos afropanameños de raza negra, Mamie Phipps Clark y su esposo Kenneth B. Clark, llevaron a cabo una serie de ensayos psicosociales con niñxs norteamericanxs de raza negra en edad preescolar. En dichos experimentos, les dieron a elegir entre dos muñecas, una negra y otra blanca… Al comienzo de las sesiones, la doctora preguntó a una de las niñas cuál era la muñeca mala y de forma inmediata la niña señaló la muñeca negra. Luego le pidió que le explicara por qué era mala y la pequeña respondió que porque era negra. Por último, le preguntó: “¿Cuál es la muñeca que se parece más a ti?” y la niña, con recelo, sin decir nada, tomó en sus brazos a la muñeca negra… En efecto, la gran mayoría de las niñas y niños negros prefirieron la muñeca blanca y le atribuyeron características positivas. Su explicación incidía en que las muñecas negras eran feas mientras que las muñecas blancas eran más bonitas. La conclusión de los Clark fue que los niños negros, a la corta edad de tres años, ya no se identificaban con las muñecas negras ni reconocían su identidad racial, y que a los cinco años ya habían desarrollado las mismas imágenes personales negativas derivadas de los valores ideológicos de la sociedad dominante. A esa corta edad, los niños ya habían integrado los prejuicios de la sociedad, y con ese bagaje crecían desarrollando un sentimiento de inferioridad frente a los blancos construido socialmente.
    Lo normal sería sentir compasión de esxs pobres niñxs afroamericanxs al entender como se construye su subjetividad desde la misma infancia. Y sin embargo, eso sería como ver “la paja en el ojo ajeno sin ver la viga en el propio”: porque los prejuicios sobre las clases sociales y las jerarquías se construyen de la misma manera y nos alcanzan a todxs.

    Universidad de Texas. 1955.
    Los psicólogos Lefkowitz, Blake y Mouton llevaron a cabo un experimento que consistió en realizar el conteo de los individuos que seguían a un sujeto que se arrancaba a cruzar la calle pese a que el semáforo estaba en rojo para los peatones. Demostraron estadísticamente que la proporción de individuos que se iban de forma automática detrás del actor contratado por los investigadores era muy superior cuando éste iba vestido con traje y corbata, que cuando llevaba vaqueros y zapatillas.

    Los Ángeles. 1968.
    Siguiendo esa línea, los también psicólogos Doob y Gross realizaron un experimento que consistió en observar la reacción de los conductores cuando el vehículo de delante de ellos no arrancaba en el momento en que la luz del semáforo cambiaba a verde. Para ello bloquearon alternativamente el tráfico con dos coches, en un caso con un modelo nuevo y de lujo en contraposición a un cacharro viejo y barato. El resultado fue que de manera estadísticamente significativa, los conductores obstaculizados hicieron sonar sus bocinas antes y durante más tiempo en el caso del automóvil desvencijado y de bajo status que en el del modelo nuevo y suntuoso.

    Por supuesto con todo esto no pretendemos justificar el cinismo, el egoísmo, la mala fe, la ceguera interesada pues a día de hoy ya es imposible atribuir a la ignorancia o la falta de conciencia, la indignación que algunas personas expresaron cuando, por ejemplo, los compañeros de Cañamero y Sánchez Gordillo expropiaron unos pocos carritos de comida para los hambrientos mientras de forma simultánea la degenerada y corrupta élite dirigente del país se apropiaba de toda la riqueza social, desahuciaba a 400mil familias condenándolas a la miseria, intentaba deteriorar la enseñanza y la sanidad públicas para posteriormente quedárselas, y endeudaba al conjunto de la población comprometiendo nuestro futuro y el de nuestrxs hijxs… Tenemos claro que lo políticamente correcto en una sociedad cruel e inmoral es sencillamente un crimen basado en la ignorancia de no querer ver, en definitiva mentiras y racionalizaciones para escapar del miedo o escamotear el compromiso a cambio de una tranquilidad ficticia.

    Bien entendido esto, éste escrito es una invitación a lxs revolucionarixs a afilar y mejorar nuestro pensamiento, a deconstruir los conceptos aprendidos, a cuestionar todos los aspectos de la realidad vigente, a cotejar indiscriminadamente nuestras ideas con las de lxs otrxs a través del “estallido conversacional”.

    TroppoVero

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  29. santiago

    Que somos esclavos de los distintos gobiernos, dado que solamente han procurado todos ellos,aniquilar al individuo, la persona, la familia, incluido hasta el libro de familia. Hasta la fecha esto ha sido una Dictadura Democrática y sigue siendo, en el sentido de que no les interesa, cambiar nada de nada.
    En educación empezó el fracaso, con Felipe González(Rubalcaba), cuando eliminaron las tarimas de los profesores. El alumno tenia que estar a la misma altura que el profesor. Todos teníamos que ser iguales. Que barbaridad tan barbara.

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  30. #SandyBotaObama (@kamalayamala)

    pero…, ¿acaso no oyes todo ese alboroto, es que vienen ya los bárbaros? si amigos, la epistemología del sur, la bárbara, la indígena, la que deja claro que lo global menos el Sur es igual a Europa, igual a cero.

    Los congresos guay ya se han apuntado, al talking circle.

    Jerry Mander patinó con su fobia a las tecnologías, igual que yo; en su libro «El fracaso de las tecnologías», muestra cómo tanto el socialismo como el liberalismo, en sus inicios, mamam de las asambleas indigenas de la región, en areas no cristianizadas aún; encuentran nuestros colonos americanos con Jefferson, y por su lado Morgan, que después es leído por Engels, en los propios salvajes, aprenden a poner paz y a organizarse socialmente, en las primeras constituciones americanas, etc…

    «Cualquier buen vino, tiene que volver a la madre».

    y por eso ni me permitop ahora corregir lo escrito, aunque no se entienda «a la usual», sale como sale…y ese también e su valor.

    Pero cuando aterrizas con estas ideas en educación, la esquizofrenia capitalista está asegurada.

    La izquierda protesta bolonia, bolonia regala democracia revolucionaria a dia de hoy, el 15m mismo a gritos, pero eyos solo miran pa las tasas.

    Las universidades mas caras, lucen aulas pequeñas con las sillas alrededor amorosamente, de una grande y acogedora mesona.

    Si miras una fiesta gitana indigena popular… veras que adoptan la misma libre y atractora premisa postural. el circulo es inmanente tendemos a formarlo sin apenas echar cuenta.

    ahi un pais especial allí arriba, en el circulo polar, que saca un diez en educacion, y dan la mitad de
    horas de clase, y a su vez la mitad de la mitad son al aire libre, e invierten menos que otros paises en dinero, lo veis iquierda, como ahora no (solo) es cuestión de dinero?

    hay una educacion prohibida, de la que habla el homónimo documental, que, a su vez, se parece, digamos, en demsía, tanto a Harvard, como a la educacion funlandesa

    el circulo, señoras es, hablar, mirarnos cara a cara, un aula uaula en u, cosintiendonos, ya desde posturalmente, que nuestra postura utera, sea tan acogedora, que las mentes puedan sentirse, por fin cerca, en simbiosis, y no en las lineas paralelas, silenciosas, de las aulas, cada vez menos, dominadas por la leccion magistral, en vision frontal excluyente, en vez de en U

    lo que se impone es el taller, lo practico, compartir, sacar el maximo partido a lo comunitario, y afortunadamente ya las empresas «nos mean la oreja a las universidades», a no ser que estas se queden en Babia…

    respecto a la tarima, desde la asociacion ISMA proponemos substituirlas por paredes escalables, retirar las bancas esclavas y abrirse a todas las posibildades que la educacion alternativa, sin examenes ni memorización, sino aplicada a todo el cuerpo, a todo tú, ¡y no sólo a tu chorla!, ha conseguido ya y ahora se brinda como siempre a seguir contagiando a sus primas mas formales las universidades

    «güerbe er zentío komún»

    besos!

    ¿besos también en las aulas?

    (los robots pueden quedar exentos)

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  31. John Rambo

    Los mass media son socialistas en mayoría, y dan malas noticias todos los días para desmorarlizar (ya que no pueden convencer).
    Para muestra un botón: Un caso sangrante es el de La Noria de Tele-5 que no dedicó un solo programa a la crisis, mientras goberno Zapatero, en 2011 !!! con varios años ya de crisis. Ahora es mimso programa desde que gobierna el Partido Popular TODOS los programas sin excepción los dedica a hablar de crisis, paro, deshacuios…
    ¿Qué pasaba antes y que pasa ahora? Manipulación, sí, pero manipulación socialista.

    PD: No pongas como ejemplo a Islandia, como si los tuviéramos que imitar. Tan bien no harán las cosas cuando es el Pais del mundo donde más gente se suicida.

    PD: 2: En la Comunidad de Madrid solo ha privatizado la gestión de 3 hospitales públicos, repito: la gestión, porque sigue siendo gratis cuando te atienden. En Andalucía gobernada por el Psoe desde hace 30 años, se han privatizado 17 hospitales. Pero solo suena en los medios socialistas Madrid, porque allí gobierna el PP.

    Así que guapa, a otro perro con ese hueso. No cuela.

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  34. www.policiasocial.org

    Razón no le falta al artículo. Me quedo con el cabrón ese, el tal Seligman, que electrificaba a los perros. Le echaba encima al del PP de Tenerife, para que le aplique su doctrina contra los scraches.
    Un saludo y enhorabuena por el artículo y la página.

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